Objetivo 2008

Actual y anteriores.


 

El año pasado escribí cómo objetivo, que Argentina, que ya estaba en pleno crecimiento, debía planificar de qué forma debía ir adecuando su sistema de transporte. No solo había que estudiar las necesidades de nueva infraestructura para acompañar el crecimiento y los cambios en el transporte marítimo, también había muchas lagunas en las reglas de juego, que se convirtieron en cuellos de botella para el Comercio Exterior. Mencioné que en los países exitosos autoridades y cámaras empresariales organizan generalmente debates para analizar los problemas existentes y que tratan de prever cómo podrán agravarse aquellos con el crecimiento, si no se tomen a tiempo medidas correctivas. Si Usted no aclare cual es su problema, nunca podrá llegar a una aceptable solución. Poco hemos avanzado y casí se podría repetir textualmente el texto del objetivo del año pasado. El país sigue creciendo, pero poco o nada se hace para asegurar que podemos seguir operando en forma eficiente. Por eso repito mi llamado del 2007, que comencemos urgentemente debates públicos. Repito que los únicos que se producen en nuestros círculos, son aquellos interminables encuentros donde se discute qué proyecto se va a usar para la construcción de la mal llamada “autopista ribereña”, cuya realización ya se ha decidido hace tiempo y donde las autoridades ya deberían tener suficientes datos para juzgar que proyecto elegir. Pero sigo sin tener información sobre discusiones de nuestros problemas básicos y de cómo se piensan solucionar los crecientes problemas en el tema Puertos y Transporte interno, dos cosas inseparables por su fuerte interacción.